Hola a todos, que les puedo decir.
Primero que todo, un gran saludo, segundo, como decimos popularmente, me comió la tecnología. Resulta que olvide el correo, o la contraseña, aun no lo sé realmente, pero el tema es que hoy logré encontrar la opción para recuperar mi blog, pero antes de eso, mi cuenta; lo simpático es que era muy sencillo, pero bueno, aquí vamos de nuevo.
En estos dos años han pasado muchísimas cosas buenas, hay que ser muy positivo, las menos buenas son para madurar, para aprender, para agarrar fuerzas, técnica y malisia indígena. Dentro de todo lo bueno que he hecho, hay viajes a regiones del vino, estudios, cocina, eventos, y lo mejor, siempre disfrutando y compartiendo el mundo del vino.
En Embajada del Vino, la meta es dar un punto de vista; mi punto de vista y que usted amigo, amiga que lee este espacio, esté de acuerdo conmigo o bien no, así que te ánimo a compartir tus comentarios, siempre serán bien recibidos.
En este momento estoy tomando o mas bien degustando, saboreando un delicioso ron de 12 años muy delicado, equilibrado y algo que me gustó y me llamó la atención es el tapón de corcho de ésta botella. Así que entenderán que me inspira para en medio de un sábado por la tarde, con un clima fresco, en compañía de mis hijas, escribir para ustedes. Hoy el día empezó muy bien, temprano una reunión de trabajo, al medio día compras con mis hijas para entrar a la cocina y disfrutar entre fogones, cuchillos y buenos productos, ofrecer un delicioso y nutritivo almuerzo a mi familia; les cuento que el calor debo decirlo lo apasiguó una refrescante cerveza lager rubia, luego un poco de estudio y bueno, en este momento escribiéndoles.
Quería hablarles de tantas cosas y creo que aún no he dicho mucho, pero para aterrizar estoy trabajando en un material técnico si se puede llamar así, pero la idea es ofrecerles temas nuevos sobre la enogastronomía nacional y mundial. Escuchando a la Checa en su programa de radio, han tocado en 45 minutos muchos temas como el cuscus, la cocina tradicional francesa, el champagne y lo que mas me llama la atención, es que hace en su programa de radio catas que comparte en vivo con un invitado, en este caso es un sommelier de un restaurante de Buenos Aires que hablan de todo y es interesante, al menos entretenido escucharlos y por supuesto, aprender y también, cuestionarse algunas cosas, que dentro de ellas está que la Checa dice que a ella no le gusta llamar a los vinos espumantes, valga la redundancia, espumantes... por alguna razón insiste en llamarlos, o mal llamarlos champagne; al menos en la escuela e internacionalmente siempre se recalca que el vino espumante champagne únicamente puede llamarsele a los vinos espumantes que provienen de la región norte de Francia, Champagne. Pero dentro de las cosas interesantes que conversó sobre este tema, es la cada vez mas común presencia en el portafolio de las bodegas, el espumante rosé. Y es un tema que en lo personal me apasiona, ya que creo fielmente en que un espumante rosado es muy interesante gastronómicamente hablando, ya que ofrece muchas posibilidades al tener mas estructura, no olvidemos que para llegar a un rosé o rosado interviene una cuota mas o menos de vino tinto, que puede ser el clásico pinot noir hablando de champagne, pero que puede ser malbec, cabernet, merlot, shyra, o bien cualquier otra cepa tinta, como tantas que blancas que puede formar parte de la mezcla.
Pues bien, acá detengo mis manos, espero que el regreso sea constante, al menos es mi meta y agradezco a todos quienes leen este blog, mi blog. Bienvenidos siempre a LA EMBAJADA DEL VINO.
Abrazos y salud!!!
